Quien dijo que no se podía ser abstemio del cariño es alguien que probablemente no lo ha tenido en mucho tiempo o no se ha dedicado a querer sentir.
Desde el evento en mi vida que me ha hecho repensar el como debo seguir y avanzar en mis pasos, tuve a su vez que quedar "solo" y sin una relación. Y llevaba tanto, tanto tiempo acostumbrado a las caricias, abrazos, besos, que hoy al no tener nada de esto me siento perdido y desamparado.
El hombre se acostumbra a todo finalmente, a lo dulce y a lo agraz, a la soledad y la compañía, pero no negare que soy como alguien que se encuentra abstemio y deseoso de poder entregar y recibir cariño. Recuerdo a mi compañera y pienso en lo feliz que era en una calma que ya no existe. Aun recuerdo algunos problemas, pero se me hacen lejanos y distantes, en cambio pienso en el tomar una siesta abrazado, teniendo aunque fuera la mano de mi ser querido y como aquello me hacia sentir muy feliz.
Pero yo decidí este camino, porque incluso con todo lo anhelante que estoy de sentir aquellas caricias que me llenarían de felicidad, debo estar seguro y ser responsable con mis elecciones, no puedo apostar la felicidad de alguien mas por el capricho... el capricho de un abstemio.