Erase una vez, en los inicios de esta historia, en donde lluvia siempre caía en la tierra de los simples mortales. Lluvia siempre con su suave abrazo, dejaba caer sus dulces gotas para mojar todo lo que abajo residía. Lluvia en un momento conoció a soledad, soledad era la compañía ideal de lluvia. Siempre estaban juntos, con soledad lluvia podía notar como caía, podía notar un gris día que te hacia reflexionar, podía pensar en si misma e intentar reconocer el mundo, gracias a soledad lluvia anhelaba cosas que jamas había pensado, lluvia y soledad se volvieron muy íntimos y siempre se encontraban juntos. Paso el tiempo y lluvia se volvió reflexiva y anhelante del frió, de la contemplación, de todo lo que le podía ofrecer soledad, pero por azares de la vida, un día, sin previo ningún aviso, como si un relámpago hubiera caído de las nubes, lluvia conoció a compañía. Compañía podía mostrarle cosas que jamas había conocido, lluvia estaba totalmente cautivado por compañía le mostró el calor que se puede tener aun con lluvia, el esconderse en un hogar, el disfrutar mientras sus sonoras gotas caen gráciles. Lluvia que parecía alguien muy contemplativo, se volvió poco a poco alguien que anhelaba estar con compañía y sin darse cuenta dejo a soledad.
La historia se repitió y lluvia comenzó a estar siempre con compañía, aprendió muchas cosas de esta relación que ambos mantuvieron, pero llego el momento en donde lluvia se alejo de compañía. Lluvia volvió al frió meditabundo de soledad, ahora conociendo a compañía, Lluvia jamas extraño a soledad pero ahora estando nuevamente en soledad no podía dejar de pensar en compañía.
Los días volvieron a la normalidad, lluvia a veces se presenta y a veces no, compañía no volvió a estar por estos lugares, lluvia la alejo con su comportamiento, soledad siempre aparece tímidamente como una buena amiga de lluvia. Mientras todo esto ocurre, lluvia piensa para si mismo si es bueno extrañar a compañía estando con soledad, de sus nubosas mejillas brotan unas gotas, a veces lluvia se presenta cuando extraña a compañía, otras cuando sale a jugar con soledad. Pase lo que pase, lluvia seguirá saliendo, seguirá lluviosa y seguirá siendo lo que es...lluvia.
(un café...un abrazo...una cama y mucho regaloneo, realmente lluvia extraña a compañía)
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